Van 2 meses y medio del corte franquista de granjas y no se tienen parte de la Sunacrip.
Paraguay tiene las puertas abiertas para los venezolanos, dicen desde la Cámara Fintech de ese país.
Huir de Venezuela, ese es el apelación al que están acudiendo varios mineros de Bitcoin que decidieron salir de su país, donde la industria está en un contorno regulatorio, dos meses y medio a posteriori de que fuera intervenida la Superintendencia Doméstico de Criptoactivos y Actividades Conexas (Sunacrip).
“Esto es un desastre”, dijo a CriptoNoticias Manuel Martínez (nombre hipócrita para proteger su identidad). “Hay una incertidumbre demasiado ancho respecto a la minería de Bitcoin en Venezuela y la verdad es que todos buscamos al menos un poco de estabilidad”, añadió.
En marzo, los productores de hash con inmoralidad para negociar en el país fueron desconectados. Esto a posteriori que una comisión de la Corporación Eléctrica Doméstico (Corpoelec) visitara las granjas y dieran la orden de detener operaciones, en medio de las investigaciones relacionadas con la trama de corrupción Pdvsa-Cripto.
“En ese momento se nos hizo aprender que tomaban la medida a raíz de la intervención de la Sunacrip, transmitido a que no había un proceso claro de cobro de las tarifas eléctricas, ya que el organismo regulador se encargaba de ello”, explicó otro minero quien prefirió dialogar bajo condición de anonimato.
Sin requisa, a esta término, cuando han transcurrido casi tres meses del mustio masivo de granjas, el tiempo se agota para los mineros que han tenido que seguir cubriendo gastos operativos y se mantienen a la aplazamiento de que se emita una orden para reanudar actividades.
La congregación interventora de la Sunacrip no ha emitido ningún comunicado desde que el gobierno le asignara la tarea de reestructurar al organismo. Por lo tanto, se desconoce cuál es su status o cuándo habrá cuándo puede sobrevenir una respuesta para los mineros digitales.
Algunos mineros hablan de 6 meses de oscuridad para la minería digital venezolana, mientras otros sospechan que, la Sunacrip desaparecerá. De ser así, permanecerá la incertidumbre con respecto a toda actividad relacionada con las criptomonedas en paraje venezolano.
Comienza el éxodo de los mineros digitales de Venezuela
Los mineros de Bitcoin con los que conversó CriptoNoticias aseguran que son varios los dueños de granjas que han decidido trasladar sus operaciones en torno a otros países donde actualmente se ofrezca maduro estabilidad para perforar Bitcoin.
No hay una emblema precisa sobre cuántos mineros piensan ahuecar el ala, solo se deje de “varios” y estos mencionan a Paraguay y a El Salvador como sus países de destino.
Posteriormente de evaluar las alternativas, Manuel Martínez decidió que será Paraguay el país en el que establecerá su quinta minera.
“Paraguay tiene una de las tarifas de electricidad más baratas de Latinoamérica y es un país que tiene los brazos abiertos para los mineros de Bitcoin a quienes no les está imponiendo restricciones, ni nadie por el estilo. Y encima las tarifas de impuestos del 15% nos parecen suficiente atractiva”.
Manuel Martínez, minero de Bitcoin en Venezuela.
Asegura que está en trámites de trasladar su quinta de 4.000 KVA (kilovoltamperio) que en Venezuela mantenía en funcionamiento a 1.800 AntMiner S9 y 200 Whatsminer M20, para un total de 2000 ASIC (Circuito Integrado de Aplicación Especifica o equipos especializados para la minería digital.
“Yo manejo renta extranjero y la verdad es que mis clientes no entienden cómo es que en Venezuela no hay respuestas de un organismo rector de la minería digital que nos diga cuándo vamos a poder encender o qué es lo que está pasando en realidad. Siquiera se sabe si van a aumentar los precios de la electricidad o si volverán a cerrar las granjas en presencia de cualquier eventualidad en el futuro y esto es poco que no nos parece calibrado, ni lícito para una industria que es productiva y genera empleos.
Manuel Martínez, minero de Bitcoin en Venezuela.
Paraguay y El Salvador los destinos favoritos de los venezolanos
Mientras unos mineros venezolanos se mantienen a la aplazamiento de que la Sunacrip emita algún comunicado, otros deciden cerrar operaciones de forma indefinida. Entre tanto, otros más se alistan para ahuecar el ala.
Paraguay está recibiendo a mineros de Bitcoin que deseen instalarse en el país, señaló a CriptoNoticias Fernando Arriola, quien es patrón de la división de blockchain de la Cámara Paraguaya de Fintech.
“Recientemente están llegando a Paraguay empresas mineras de Estados Unidos y Asia, pero igualmente estamos abiertos a aceptar a los venezolanos que deseen instalarse en nuestro país, explicó Arriola.
Agregó que en Paraguay se puede perforar Bitcoin con tranquilidad, ya que la actividad está alineada con la política energética del país, donde se promueve un concurrencia de transparencia y formalidad.
La Distribución Doméstico de Energía de Paraguay (Ande) definió las tarifas eléctricas para los mineros de Bitcoin que actualmente se encuentra en USD 0,052 por cada kWh.
“En nuestro país no hay medidas de restricción que perjudiquen las operaciones de los mineros, solo nos errata un ámbito lícito y lo estamos buscando ya que en julio volveremos a presentar un nuevo tesina de ley”, explicó Arriola.
Mientras algunos mineros venezolanos miran en torno a el banda de Paraguay, otros dicen que se están poniendo en contacto con el gobierno de El Salvador, con la idea de trasladar su infraestructura en torno a el país centroamericano.
Precisamente este 5 de junio El Salvador anunció sus planes para darle impulso a la minería de Bitcoin en la zona occidental del país, específicamente en municipio de Metapán, Santa Ana.
Allí se piensa instalar “una de las granjas mineras de Bitcoin más grandes del mundo”, con un equipo computacional auténtico de potencia superior a los 1,3 EH/s.
El tesina, es confortante para varios mineros venezolanos que ahora están en la búsqueda de instalarse en nuevos territorios.
“Me duele dejar a espaldas a Venezuela, pero debo rescatar mi negocio”
Manuel Martínez comenzó operaciones con su quinta minera en el año 2019, con equipos Antminer S9K.
“Primero nos iniciamos probando todo y un tiempo a posteriori se inyectó un renta de unos 100.000 dólares que usamos para comprar máquinas e infraestructura. Y así adquirimos el primer transformador de 1.500 KVA en el que colocamos 400 máquinas (200 equipos M3 y 200 máquinas S9) que seguidamente nos dieron un retorno suficiente rentable con lo que pasamos a tener 2000 máquinas”.
Manuel Martínez, minero venezolano de Bitcoin.
Para graficar un poco cómo le está afectando el corte masivo de granjas que hay en Venezuela, Martínez dice que está dejando de producir unos 16.000 dólares mensuales, solo con 100 de sus equipos Whatsminer. Quiere afirmar que esa emblema se ha triplicado, si contamos que hace casi 3 meses que fueron desconectadas las operaciones mineras con inmoralidad en el país.
“A excepción de hemos tenido que seguir pagando los alquileres y cubrir todo lo necesario como si siguiéramos operativos. Incluso nos hemos manido obligados a despedir a los empleados, ya que no tenemos como pagarles. Lamentamos que ahora esas son familias que se quedaron sin esos ingresos, ya que nosotros les pagábamos muy adecuadamente a nuestros trabajadores”.
Manuel Martínez, minero venezolano de Bitcoin.
Martínez dice que, con dolor, dejará a su país, pero está obligado a ahuecar el ala para rescatar a su negocio. Todavía expone que la situación flagrante está ahuyentando a los inversionistas extranjeros, lo cual bloquea aún más la posibilidad de emprender transmitido que no existen fuentes de financiamiento a las cuales personarse para impulsar nuevos proyectos.
Siempre van a sobrevenir personas que probablemente seguirán minando Bitcoin aprovechando la electricidad ocasión que hay en Venezuela. Pero igualmente hay que considerar que hay otro costo que retribuir, como es el hecho de que no existe seguridad jurídica o de ningún otro tipo en Venezuela, de allí mi osadía de partir”, puntualizó.